Un hombre que se desempeña como bombero voluntario sufrió una golpiza a manos de una patota, en el barrio Parque Ingeniero Serantes de la capital provincial.
El incidente ocurrió a la madrugada, cuando el voluntario caminaba acompañado de su pareja y un amigo.
Hugo Alberto M., de 45 años, iba con sus conocidos en dirección a la avenida Cartagena cuando varios jóvenes que estaban en la esquina de Escocia y Boston se cruzaron a su paso. Notaron que no son del barrio. Sin mediar palabras, esos vándalos comenzaron a pedirles dinero, como una forma de "cobro de peaje", según la jerga policial.
Para intentar escapar de esa situación, los tres comenzaron a alejarse. Sin embargo, los persiguieron por cerca de una cuadra hasta alcanzarlos y golpearlos con saña. Hugo M. cayó al suelo próximo al cruce de Boston e Inglaterra. Acusaba diversas lesiones producto de patadas y puñetazos, principalmente en la cabeza. Su pareja y su amigo lograron evitar una paliza similar y solicitaron ayuda.
Una patrulla del Grupo de Respuesta Inmediata Motorizada 2 (GRIM 2) acudió a la urgencia.
El bombero debió ser cargado a la unidad policial para su traslado hacia el sector de emergencias del Hospital Escuela. Los médicos que asistieron al herido constataron que presentaba traumatismos múltiples, aunque nada que haga peligrar su vida.
La víctima, con domicilio en el barrio 9 de Julio, habría manifestado sufrir la sustracción de un teléfono y la billetera.
Por otra parte, como saldo de una riña entre varias personas, una de ellas resultó lastimada en la cabeza. La gresca sucedió en calle Teresa de Calcuta y calle 200, del barrio Serantes. Lucas Damián O., de 22 años, ingresó al Hospital Escuela con una herida cortante.
Policías del GRIM 2 intercedieron para que los incidentes no llegaran a mayores y además, como en el hecho anterior, debieron trasladar al damnificado hasta el establecimiento sanitario.
