El intendente de Santa Lucía, José Tata Sanánez (PJ), admitió “el dolor tengo que no se vea en su verdadera magnitud este flagelo de las drogas, ya que después de años se lo agarra a este malandra que les está fundiendo la vida a todos nuestros pibes”.
“Gracias a Dios un fiscal de otro lado se acordó de este flagelo que estamos viviendo; como título diría yo: cuando las formas quedan chiquitas al lado del drama social que representa el consumo de estupefacientes”.
Su droga, “es la que se vende en mi pueblo, yo entiendo a los padres de los pibes que tomaron de testigos y que estén molestos; si yo hubiera sido padre de alguno de esos chicos estaría súper feliz porque un hijo mío colaboró para llegar a este malandra que está haciendo estragos en nuestras ciudades”. Santa Lucía está a solo 20 kilómetros de Goya.
Lo dijo la fiscal, “hace 1 año que están investigando y la operación hubiera sido un fracaso si no se tomaban esos recaudos”.
“A las madres de chicos con adicciones de mi pueblo que alguien venga a hablarle de las formalidades y van a entender de lo que les digo, están desesperadas”, graficó el intendente santaluceño.
“En este tema estoy desde que asumí y nuestras voces siempre quedan en el olvido; como intendente fui citado hace un par de años por un fiscal federal como testigo por declaraciones que hice en distintos medios, donde manifesté que las fuerzas de seguridad no hacen nada al respecto y que lo más doloroso es que en todos los pueblos la gente conoce y sabe quiénes son los que venden estupefacientes”
Sanánez les dijo “actúa hermano yo no soy cazador de deallers actúa para eso te pagan, no obstante ello le dejé un plano de mi pueblo con puntos calientes”.
“Gracias a Dios un fiscal de otro lado se acordó de este flagelo que estamos viviendo; para terminar y como título diría yo cuando las formas quedan chiquitas al lado del drama social que representa el consumo de estupefacientes”.
