El ansiado puente interprovincial que debería unir a las ciudades correntina de Goya y santafesina de Reconquista, finalmente no fue incluido en el presupuesto nacional 2017 que fue aprobado recientemente y deberá continuar en la larga cola de espera de los grandes proyectos nacionales. Para desazón de todos los movimientos y fuerzas vivas goyanas y santafesinas, que observan cómo una vez más se dilatan las ilusiones de contar con el viaducto fluvial que no solo unirá sus ciudades y traerá aparejado una potenciación de la zona, sino transformar a los dos grandes polos productivos de las provincias de Corrientes y de Santa Fe, en verdaderos generadores de desarrollo económico y social de todo el Litoral Norte Argentino, con proyección internacional Brasil, Argentina, Chile, Perú.
El proyecto tuvo una valoración inicial de u$s850 millones, unos 13.600 millones de pesos. No está en el presupuesto nacional aprobado y deberá continuar esperando, al menos, un año más.
MEGA PROYECTO
El mega proyecto para el puente Reconquista-Goya estaba listo para la licitación. La inversión para construir el puente Goya (Corrientes) Reconquista (Santa Fe) sobre el Río Paraná, se estima en unos 850 millones de dólares. El Estado Nacional había completado los estudios para un futuro llamado a licitación. Santafesinos y correntinos quieren contar con su primera conexión vial.
Todo depende de una decisión política del Gobierno Nacional: “los cuadros técnicos han terminado el proyecto ejecutivo, ahora debe licitarse, que haya interesados y que en 3 o 4 años correntinos y santafesinos tengamos una conexión directa”, describió en su oportunidad el ministro de Obras Públicas de Santa Fe, Hugo Storero.
El emprendimiento que hasta ahora era un simple esquema, algo más que una maqueta, hoy tiene las precisiones necesarias para que se llame a licitación: se han hecho estudios de suelos y subsuelo, de traza, hídricos y viales.
“El presupuesto es de unos 850 millones de dólares, pero todo dependerá de qué alternativa se escoja”, comentó el ministro. Una posibilidad es que todas las estructuras del puente principal estén hechas de hormigón y otra que contempla una estructura mixta, de hormigón y metal. En ambos casos, se piensa en un puente atirantado del tipo de Rosario-Victoria, cuya extensión será de 390 metros. La obra es prioritaria para el Ejecutivo santafesino.
El Eje de Capricornio
“El proyecto tiene chances de concretarse porque es estratégico, por ser parte de dos corredores bioceánicos”, dijo Storero, el Central que pasa por las Región Centro y el de Capricornio que atraviesa la Región Norte Grande.
El futuro cruce permitiría además una conexión directa entre el sur de Brasil y el Paso Internacional San Francisco en Catamarca que conduce a Chile, a través del eje Paso de los Libres o Santo Tomé (Corrientes), puente Goya-Reconquista, Santiago del Estero, Catamarca y Paso San Francisco.
No sólo habrá un integración entre dos provincias que aún no han podido vincularse, sino además efectos regionales en el país y a nivel internacional. El norte santafesino y el sur correntino corresponden al llamado Eje de Capricornio, un área que se extiende desde Brasil hasta el norte chileno y que comprende también a la Región Norte Grande (el NEA y el NOA), Paraguay y Bolivia.
