Más de un centenar personas se congregaron este domingo por tarde en la Costanera correntina para expresar su postura en contra de la despenalización del aborto, replicando lo que sucedió en 117 ciudades argentinas. Entre los presentes estuvo el arzobispo de Corrientes, Andrés Stanovnik. Los participantes plantearon la defensa del niño por nacer y de su madre.
Refiriéndose a su participación en la movilización, la autoridad eclesiástica dijo a diario El Libertador: “Los argentinos estamos decidiendo si defendemos o no la vida, cómo no vamos a estar acá si queremos defenderla”.
En referencia al objetivo de la expresión de los militantes Provida, una de ellas planteó: “Queremos que gente vea la situación de otra manera y tome consciencia. Legalizar el aborto no es la solución a las muertes, porque las va a haber siempre sea legal o ilegal el aborto”.