Los investigadores concluyeron que esta variante puede conferir una amplia inmunidad a múltiples cepas virales, lo que podría ser beneficioso para la protección contra delta y ómicron, actualmente prevalentes, así como contra futuras variantes.
Un estudio realizado por investigadores alemanes sugiere que los anticuerpos de coronavirus provocados por la variante beta podrían conferir una amplia inmunidad a las múltiples cepas virales, como delta u ómicron, así como a otras futuras, se informó este martes.
El Centro Alemán de Enfermedades Neurodegenerativas y de la Charité - Universitätsmedizin Berlin presentó nuevos hallazgos en la revista 'Science' sobre la respuesta inmunitaria contra la Covid-19, a partir de la investigación de los de anticuerpos provocados por la variante beta del virus.
Los investigadores concluyeron que esta variante puede conferir una amplia inmunidad a múltiples cepas virales, lo que podría ser beneficioso para la protección contra delta y ómicron, actualmente prevalentes, así como contra futuras variantes, reportó Europa Press.
Momsen Reincke, uno de los responsables de la investigación, señaló que la variante beta "muestra marcadas diferencias con la cepa original del virus" y agregó que "era la forma vírica que más se había alejado de la original".
Los anticuerpos son proteínas que el organismo utiliza para defenderse de los agentes patógenos.
En el estudio se analizaron los anticuerpos neutralizantes, capaces de unirse a distintas áreas del patógeno y lograr "que el gancho sea inútil" explicó Reincke, y agregó que "desde el punto de vista de la defensa inmunitaria, la unión a la llamada proteína de la espiga es especialmente eficaz".
Los hallazgos de estos científicos alemanes se basan en el análisis de los anticuerpos aislados de la sangre de 40 personas que habían sido infectados con la variante beta del coronavirus.
De los aproximadamente 300 anticuerpos estudiados inicialmente, 81 se unían con especial fuerza a la proteína de la espiga del coronavirus.
Este hallazgo les permitió comprender qué genes desempeñan un papel en el ensamblaje de los anticuerpos y producir artificialmente estas proteínas inmunitarias para estudios posteriores.
"Probamos si los anticuerpos contra la variante beta son también eficaces contra otras variantes del virus. Esto se llama reactividad cruzada" informó Reincke.
Y agregó: "Nuestros análisis muestran que algunos de estos anticuerpos son poco eficaces contra la cepa original. Otros, sin embargo, son muy eficaces contra la original y también contra algunas de las variantes preocupantes".
Por últimos, los científicos dedujeron que la reactividad cruzada podría ser un aspecto importante de las futuras vacunas: "Los anticuerpos generados contra diferentes variantes virales pueden complementarse entre sí y, por lo tanto, mejorar conjuntamente la potencia de la respuesta inmune contra las variantes emergentes" concluyeron en el estudio.