El grupo de Misioneros Universitarios organiza una nueva cruzada solidaria para familias afectadas por las inundaciones en la localidad correntina que lentamente se recupera de la emergencia hídrica. “Las necesidades de nuestros hermanos que han sufrido las consecuencias de las inundaciones no terminan con el hecho de haber regresado a sus casas, pues ahora se enfrentan a una dura realidad tanto material como espiritual”, señalaron desde la coordinación del grupo en una entrevista con época. Las donaciones la entregarán el próximo 5 de agosto.
En un contexto donde las aguas destruyeron todo a su paso dejando a innumerables familias sólo con lo puesto, desde hace meses San Luis del Palmar recibe con los brazos abiertos todas las donaciones que se hacen llegar de distintos puntos de la provincia. Es así, que el grupo Misioneros Universitarios, que continuamente está presente en sucesos donde se requiere solidaridad y asistencia, nuevamente apronta la entrega de donaciones a familias sanluiseñas. Esta misión se concretará el próximo 5 de agosto. Todas las colaboraciones se reciben en la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, sito en República del Líbano 250.
“Por la experiencia vivida en anteriores misiones, sabemos que la ayuda merma cuando las personas vuelven a sus hogares, y muchas veces ignoramos que es allí cuando más necesitan de la solidaridad de las personas. Por ello apelamos a toda la comunidad para que se sumen, en ésta nueva misión y nos acerquen sus aportes de mercaderías no perecederas, en especial azúcar, leche, yerba, harina y fideos, pero todo aporte es bien recibido”, explicó a época Mariana Benítez, referente del grupo.
También es de vital importancia asistir en la limpieza de los hogares, por ello solicitan elementos de desinfección e higiene. Por otro lado, al perderlo todo, urge la necesidad de ayudar con ropas: “Pedimos abrigos, frazadas y calzados. Encarecidamente solicitamos que los abrigos y calzados estén en buenas condiciones y limpios, porque debemos aliviar la situación de tantos hermanos y pensar en ¿cómo nos gustaría recibir a nosotros? si nos tocara vivir una situación tan desesperante como ésa. Los calzados deben estar en condiciones de ser utilizados, con sus plantillas y cordones en el caso de las zapatillas. Si alguna persona nos quiere donar cordones, cierres y botones, son bienvenidos, pues contamos actualmente con muchas ropas donadas que no están en buenas condiciones y las estamos reparando con la ayuda de costureras, pero los materiales se encarecen cuando faltan”, describió.