Regatas Corrientes se metió directo a cuartos de final, tras finalizar tercero en la Fase Regular. En el camino tuvo que atravesar con un arranque irregular, bajas por el Covid-19 y de menor a mayor logró el primer objetivo.
El Club de Regatas Corrientes consiguió esta semana meterse directo a los cuartos de final de la Liga Nacional de Basquetbol. Terminó tercero en la Fase Regular y de esta manera aguarda rival para lo que viene. Este primer objetivo conseguido por los de Victoriano requiere un análisis cronológico de cómo se concretó.
“Vamos a ir mejorando, esto recién empieza”, comentaba el entrenador Lucas Victoriano tras el debut en la temporada 2020-21 ante San Martin con derrota. Ese arranque fue con 4 triunfos e igual cantidad de derrotas.
El rendimiento deportivo no era por entonces la única preocupación del “remero”, ya que lamentablemente se vio muy afectado por el Covid-19. El primer caso fue del escolta Juan Pablo Arengo, que debió afrontarlo en la total soledad de su habitación de hotel. Misma situación les toco a los convocados a la selección, Tayavek Gallizzi y Marco Giordano.
Luego la delegación que regreso a Corrientes, tampoco tuvo buenas noticias porque nueve de ellos resultaron positivos. El panorama no era muy alentador porque también cayeron el DT, Lucas Victoriano y su asistente Ignacio Barsanti.
La dirigencia correntina se movió rápido y resolvió convocar a Fernando Calvi para que asuma la dirección técnica. Fue un punto de despegue porque Regatas terminó su 2020 con 11 partidos ganados y 7 perdidos, lo que le dio un récord de 61,1%, que lo ubicó en la 7° posición.
“Terminé la primera parte de la burbuja de muy buena forma, y después el Covid-19 me hizo muy mal físicamente”, recordaba Gallizzi. “Si bien no me trató mal de salud, si lo hizo en lo que es ritmo, y cuando me sumé al equipo me di cuenta, y mis compañeros también, que no estaba al 100%”. Pese a esto el pivote santafesino redondeo una gran fase regular, siendo el goleador con un promedio de 11,5 puntos y 4,5 rebotes, hombre vital sin dudas para este gran presente.
En el medio también hubo cambios de nombres en el plantel, terminaron su vínculo Jamaal Levy y Omar Cantón. Llegó entonces Agustín Caffaro para completar al fantasma. Enero fue más que positivo con 6 triunfos en 7 presentaciones.
“Estamos en pleno crecimiento”, analizaba Vildoza. Otro que la paso mal a raíz del Covid-19 pero que terminó comandando muy bien al equipo con un promedio de 4,0 asistencias y 1,9 robos.
Lamentablemente el Covid-19 afectaría nuevamente al plantel profesional, porque Caffaro resultó positivo y fue baja tras sus primeros juegos en el “fantasma”. En febrero ya con plantel completo, redondearía otro buen pasaje con 4 triunfos en 5 encuentros.
Ansiado tiempo de trabajo en Corrientes, los seleccionados: Gallizzi, Giordano y Fernández trabajando bajo las ordenes de Piccato y el equipo gozo de un tiempo de descanso. Fueron unas semanas de mucho trabajo, donde Victoriano hizo foco en la defensa.
En la reanudación de la competencia, Regatas se mostró un tanto irregular, le costó agarrar ritmo y su goleo sin dudas bajó. Aunque nuevamente terminó con un record positivo de 5 triunfos en ocho presentaciones en el mes de marzo.
Sin dudas que el equipo fue construyendo su identidad de manera progresiva, creció de menor a mayor en volumen de juego y eso le permitió conseguir importantes victorias como ante Quimsa y San Lorenzo, uno y dos de la competencia respectivamente. Sin embargo, lo más destacable es que se sobrepuso a las diversas adversidades y con la intensidad que lo caracteriza se aseguró estar entre los cuatro mejores de la Fase Regular.
