El velista, en diálogo con Télam, también explicó que está "con la consciencia súper tranquila" porque el equipo "trabajó con un esfuerzo y una determinación increíble", de cara al debut junto a Cecilia Carranza Saroli en la clase Nacra 17.
El argentino Santiago Lange, triple medallista olímpico en vela y quien competirá junto con la rosarina Cecilia Carranza Saroli en Nacra 17, se mostró "confiado" con sus chances en Tokio 2020, al tiempo que destacó el "salto de calidad" tras los entrenamientos que realizaron con las tripulaciones de Austria, Italia y Gran Bretaña y que les demandó "un esfuerzo mental muy fuerte".
"Yo estoy confiado porque sé que trabajamos muchísimo y muy bien. Eso me da confianza en un contexto de incertidumbre. Estoy con la consciencia súper tranquila porque nuestro equipo trabajó con un esfuerzo y una determinación increíble", admitió Lange en declaraciones a Télam.
Lange, de 59 años, compitió en seis Juegos Olímpicos: Seúl 1988 (Clase Soling), Atlanta 1996 (laser), Sydney 2000 (Tornado), Atenas 2004 (Tornado), Beijing 2008 (Tornado) y Río de Janeiro 2012 (Nacra 17).
El velista argentino obtuvo las medallas de bronce en Atenas 2004 y Beijing 2008 junto con el correntino Carlos Espínola en la clase Tornado; y luego, en sociedad con la rosarina Cecilia Carranza Saroli -medallista panamericana 2011-, la presea de oro en Río de Janeiro 2016, en la bahía de Guanabara, en la clase Nacra 17.
En Río de Janeiro 2016, la dupla argentina ganó la primera medalla de oro de la vela argentina en los Juegos Olímpicos
En septiembre de 2015, Lange, padre de Yago y Klaus -séptimos en la Clase 49er en Río 2016-, fue sometido a una operación en la que se le extirpó un tumor en un pulmón.
Lange y Carranza Saroli -ganadora de la medalla de oro en los Juegos Panamericanos Guadalajara, México, 2011 en la clase Laser Radial- compitieron, además, en cuatro mundiales de la Clase Nacra 17: España, 2014 (segundos); Francia 2017 (13ros.),
Aarhus, Dinamarca, 2018 (terceros) y Geelong, Australia 2020, (décimos).
La dupla "albiceleste" logró su clasificación a los Juegos Olímpicos Tokio 2020 en el Mundial de Aarhus, Dinamarca, de agosto de 2018, en el que terminó tercera.
Las pruebas de vela de las diez clases olímpicas se disputarán, entre el 15 de julio y el 4 de agosto, en Enoshima, y en Nacra 17 están previstas doce pruebas, desde el miércoles próximo, en la fase clasificatoria y una medal race, regata definitoria y de valor doble que disputarán los diez mejores de la fase regular.
En la historia olímpica, la vela argentina conquistó diez medallas: una de oro, cuatro medallas de plata y cinco de bronce, de las cuales cuatro fueron ganadas por el correntino Carlos "Camau" Espínola.
- Télam: Ustedes siempre llegaban con mucha anticipación al lugar de las competencias. Así lo hicieron en Río 2016. Esta vez afrontarán JJ. OO con solo un puñado de días previos antes de la primera regata ¿Eso influirá?
-SL: Sí, va influenciar. Es cierto, históricamente fuimos, a nivel mundial, el equipo que pasaba más tiempo y más investigaba las condiciones del lugar de cada competencia. Y esta vez fue una preparación totalmente diferente. Pero ya está, fue igual para todos. Quizá para nosotros un poquito peor porque nuestra fortaleza está en conseguir el mejor material, las mejores velas, el mejor barco. Y nos cuesta un poco más que la gente joven aclimatarse el lugar. Pero son los Juegos Olímpicos y hay que estar preparados como sea.
-T: ¿Qué te dejó la experiencia de entrenar varios meses con equipos de la talla de Austria, Italia e Inglaterra, campeones mundiales y medallistas olímpicos?
-SL: Fue una experiencia increíble y especial, con equipos muy fuertes. Formamos un buen equipo de trabajo, se trabajó muchísimo. Entrenar absolutamente todos los días con los mejores del mundo fue un esfuerzo mental muy fuerte. Quizá demasiado, por momentos, pero dimos un salto de calidad. Sufrimos muchísimo ya que los italianos como los ingleses eran superiores y alcanzarlos fue un trabajo muy duro. Hoy estamos igual que ellos con cualquier condición hasta 30 kilómetros de viento. De ahí para arriba ellos son un poco superiores. Son fuertes con mucho viento. Eso es en el entrenamiento, después hay que competir.
-T: En octubre del año pasado disputaron el último torneo internacional. Eso complicará el rodaje en aguas japonesas ¿Cuál es tu visión sobre la falta de competencia real?
-SL: No es fácil. Son unos juegos muy especiales en todos los sentidos y la falta de competencia, obviamente que la tratamos de suplir. Hicimos muchos amistosos con los rivales; los equipos juveniles, pero no es lo mismo. Por eso es muy difícil predecir un resultado porque no sabemos cómo evolucionaron el resto de los equipos. A los australianos, que son buenísimos, no los vemos desde febrero. Y así puedo nombrar a los franceses, españoles, a los que no vemos desde septiembre.
-T: ¿Cuán difícil será repetir oro de Río 2016?
-SL: Yo estoy confiado porque sé que trabajamos muchísimo y muy bien. Eso me da confianza en un contexto de incertidumbre. Estoy con la consciencia súper tranquilo porque nuestro equipo trabajó increíblemente, con un esfuerzo y una determinación increíble. Trabajamos inteligentemente. Es precipitado arriesgar un resultado.
-T: ¿Tokio es tu 'last dance' o tenés cuerda hasta París?
-SL: Esta pregunta voy a poder contestarla después de Tokio. La verdad es que una parte mía sueña con llegar a París; otra hacer cosas que no puedo hacer por estar en el alto rendimiento. Tengo que ver cómo nos sentimos en Tokio, quienes del equipo están dispuestos a seguir, con qué organización y qué chances tenemos de poder ser exitosos. Todo eso lo sabremos después de Tokio.
-T: A comienzos del año, comentaste que no te vacunarías. Lo hiciste ¿Cuáles fueron los motivos del cambio?
-SL: Es verdad, dije no iba a vacunarme. La responsabilidad de representar a nuestro país; el trabajo que hizo el equipo, me llevó a vacunarme. Fue un tema de responsabilidad con miras a un gran sueño y un gran objetivo. Son cinco años de trabajo y hay que minimizar los riesgos de contraer coronavirus. Eso hizo que todos nos vacunemos.
-T: Tres campeones mundiales, Vittorio Bissaro, Ruggero Tita y John Gimson; Thomas Zajac, bronce en Río te llenaron de elogios y te calificaron de "leyenda de la vela olímpica" y sostuvieron que, junto con Cecilia, "están en condiciones de repetir el podio de Río" ¿Qué te genera esto?
-SL: Me llena de orgullo. No hay nada mas lindo que el reconocimiento que un rival, porque son con los que estás expuesto, con los que competís, con los que tenés la responsabilidad de competir con mucho respeto y fair play. Si ellos te elogian de esa manera es un gran privilegio y honor.
-T: ¿Quiénes son tus candidatos al podio?
SL: Mis candidatos son el italiano Ruggero Tita, el australiano Jason Waterhouse y el británico John Gimson.-
T: ¿Cómo atravesaste la pandemia?
-SL: La pandemia fue muy dura. Perdí a un familiar, no puedo ver mucho a mi vieja. La postergación de los Juegos fue dura. Nos pegó, a todos nos pega. Ahora estamos hace casi un año de gira y todo fue difícil. Pero hay que seguir para adelante persiguiendo las cosas que nos hacen felices. Télam