“No quiero ver a nadie” gritó el mandatario provincial al personal de Ceremonia y a su Jefe de Seguridad durante el acto de reinauguración de la Plaza 25 de mayo. Desde este martes se pide credencial a periodistas y funcionarios.
Para el acto central de este martes por la mañana en la Plaza 25 de mayo, la Policía Provincial, valló una cuadra a la redonda toda la Gobernación y el propio espacio público donde se realizó el tradicional izamiento de la bandera pasadas las 8 de la mañana.
La sorpresa fue cuando empezaron a llegar a la zona periodistas y funcionarios. A todos les fue pedida una credencial y DNI para poder traspasar el vallado de seguridad.
Es el resultado del enojo del Gobernador que desde hace días ve en las redes sociales como es objeto de crítica de la ciudadanía, por la cantidad de personas aglomeradas en los actos oficiales.
Algo que no solamente ocurre en la Capital provincial, también sucede en los actos del mandatario en el interior.
Con la medida de esta mañana muchos periodistas y funcionarios provinciales y de la Municipalidad de Corrientes, no pudieron participar del acto gubernamental.
Algunos de los cronistas radiales que no pudieron pasar el vallado, intentaron comunicarse con funcionarios de la Dirección de Información Pública pero no fueron atendidos. Por lo que no pudieron cumplir con su tarea habitual.
Lo que más enojo generó ya que la medida, el pedido de credencial y DNI, fue sorpresiva tras los gritos del mandatario provincial de este último lunes por la tarde.
“Estaba enojado, a los gritos con los de ceremonial y su jefe de seguridad. Se enoja porque la gente critica la cantidad de personas que se juntan en los actos”, dijo a este medio un cronista de radio imposibilitado de acceder a la zona de la ceremonia oficial de este martes.
La pregunta en este contexto: ¿Teme el mandatario provincial el síndrome del café frío?
