En la jornada de ayer, llegaron a la Basílica de Itatí, las reliquias peregrinas de Santa Teresita del Niño Jesús procedente del santuario de Lisieux (Francia), y la reliquia de Santa Margarita de Alacoque, del Monasterio de la Visitación de Santa María, de Paray-le-Monial (Francia). Este acontecimiento religioso se realiza en el marco de una misión internacional por diversas parroquias y templos del mundo.
Desde el área de prensa de la Basílica de Nuestra Señora de Itatí dieron a conocer que se trata de un pequeño fragmento del cuerpo ("ex carne") de Santa Teresita del Niño Jesús y la Santa Faz proveniente de su Santuario de Lisieux (Francia).
La misma está recorriendo las distintas diócesis del país en una peregrinación titulada "Misión Corazón Amante". En tanto que informaron que las reliquias de primer grado estarán expuestas hasta hoy martes 24, al mediodía en el templo itateño. En este contexto, ayer pasada las 18 horas se habilitó un momento de oración ante las reliquias que visitan la Basílica de Itatí, que recibieron la adoración de todo el pueblo religioso.
RELIGIOSA FRANCESA
Por otra parte, desde la Basílica detallaron que la reliquia de Santa Margarita María de Alacoque, religiosa francesa que recibió las revelaciones del Sagrado Corazón de Jesús en el siglo XVII, consiste en fragmentos de las cenizas, puestos en un pequeño medallón, que han sido concedidas por el Monasterio de la Visitación de Santa María, de Paray-le-Monial (Francia).
RECORRIDO
Una reliquia de Santa Teresita del Niño Jesús y la Santa Faz proveniente de su santuario en Lisieux (Francia) llegó a la Argentina el 24 de septiembre pasado y viene recorriendo los distintos templos de Buenos Aires, para luego continuar por las demás diócesis del país en una peregrinación titulada "Misión Corazón Amante".
En respuesta a este gesto, laicos y consagrados de diferentes diócesis del país ofrecieron al santuario de Lisieux una réplica exacta de la imagen de Nuestra Señora de Luján para que sea expuesta para veneración en la capilla argentina del santuario francés.
La llegada de este obsequio, que se quedará definitivamente en la Argentina como reliquia peregrina, se enmarca en el 150° aniversario del nacimiento de la santa, y en el jubileo por los 100 años de su beatificación, según informaron fuentes oficiales.