Profetas advierten que hay que estar atentos a las señales de los tiempos, para poder pasar sin dificultades este trance, asistir a nuestros seres queridos y dar una guía práctica para prepararnos para el evento central de esa intervención, que es el Aviso, porque ya es tiempo de hacerlo.
El Aviso será un evento en el que cada ser humano verá su alma y su conciencia como Dios la ve; fue revelado desde hace siglos, todos podrán ver sus pecados no confesados, y tendrán una perfecta claridad sobre la existencia de Dios que durará sólo unos minutos.
Será como un fuego, pero no quemará la carne, aunque se sentirá física e interiormente y muchos de los que no creen, al experimentar el Aviso, cambiarán de opinión.
¿Tendremos algunas señales previas de su llegada o estamos a oscuras?
Las tendremos, antes habrá un colapso económico mundial, caída de las bolsas de valores, las monedas perderán el valor, generando revueltas y hambre.
Habrá una gran guerra, incendios cada vez más intensos en los bosques, una intensa actividad en el sol, con explosiones solares de gran intensidad, un aumento de la furia de la naturaleza, terremotos, tsunamis, huracanes, sequías, inundaciones y comportamiento anormales de los animales.
El Señor le mostró a María Julia Jahenny que algún tiempo antes, todos comenzarán a sentir en el corazón el efecto de la Justicia de Dios, y su corazón dirá “el tiempo no está lejos”, se emperezará a sentir internamente la influencia de los pecados y algunos verán visiones de espíritus malignos, como también de Ángeles y de Santos, y las aves del cielo desaparecerán, así como los animales pequeños, porque ellos presentirán la llegada del evento cósmico.
Algunos videntes han dicho que aparecerá en el cielo una Cruz Blanca, y será visible las 24 horas del día durante la semana anterior al Aviso.
¿Tenemos alguna otra referencia de qué sucesos en el mundo y en la Iglesia traerán al Aviso?
Nuestra Señora dijo a las niñas de Garabandal que el aviso vendrá cuando el mundo esté dominado por el comunismo, cuando la Iglesia esté pasando por una gran crisis, muchos escándalos, un fuerte achicamiento de fieles, y un eventual cisma.
Cuando los verdaderos fieles y sacerdotes sean perseguidos, y ya no exista la eucaristía tal como la conocemos hoy, luego de un sínodo importante en la Iglesia, estarán cerradas y los fieles no puedan recibir la eucaristía.
Por su parte, el autor alemán Albrecht Weber, dijo que Conchita de Garabandal le dijo que el Papa irá a Moscú, y cuando regrese al Vaticano, estallarán las hostilidades en diferentes partes de Europa, como preludio del Aviso.
Mientras que el padre Michel Rodrigue ha dicho que los dos eventos precursores del Aviso serán: un cambio en la liturgia de la consagración de la Santa Eucaristía en la Iglesia Católica, lo cual Dios no permitirá, e intervendrá, y cuando una o dos de las naciones principales que tienen armamento nuclear estén al borde de usarlo.
¿Qué pasará después del Aviso?
Tendremos 6 semanas, 42 días, después del Aviso, para reflexionar sin la presión de los demonios. Durante esos 42 días, debemos estar muy atentos a la conversión de nuestros familiares y amigos.
Aquellos que se conviertan deberán confesarse y recibir la Santa Comunión en estado de gracia y ser informados de lo que vendrá después. Pero Dios respeta el libre albedrío de cada persona, y si alguien decide rechazar su amor y misericordia, lo permitirá, pero tendrán que enfrentarse a su justicia luego.
Después del Aviso, muchos medios de comunicación intentarán desacreditar lo que pasó, diciendo que fue una alucinación colectiva. Por eso, debemos estar preparados para mantenernos firmes en nuestra fe y alejarnos de las influencias negativas de los medios.
Nuestra responsabilidad es llevar a nuestros familiares por el buen camino, así que debemos prepararnos para explicarles todo lo que pasó. para que lo interpreten correctamente y guiarlos a la Iglesia.
Luego de los 42 días vendrá una gran persecución, y según algunos videntes como el Padre Michel Rodrigué, Dios proveerá refugio a los perseguidos, como lo ha hecho tantas veces en las persecuciones, aunque también habrá mártires elegidos por Dios.
Asimismo, las personas serán guiadas por su ángel de la guarda hacia los refugios, ya sean temporales o permanentes, dependiendo de lo que Dios decida para cada uno.
La señal que nos indicará si debemos quedarnos en un refugio temporal o ir a uno permanente será la manifestación de nuestro ángel de la guarda.
Si el ángel se queda inmóvil sobre nuestras cabezas, eso significa que debemos permanecer en nuestro hogar y si nos guía hacia otro lugar, debemos seguirlo. Entonces desde ya hay que aprender a relacionarnos con nuestro ángel y a captar sus mensajes.
Según el Padre Michel hay tres cosas que definen un refugio permanente:
Primero: la casa debe estar consagrada al Sagrado Corazón de Jesús y al Corazón Inmaculado de María.
Segundo: debe haber una fuente de agua potable.
Tercero: habrá un ángel del guarda asignado por Dios, para proteger el lugar.
Además, Dios ha prometido multiplicaciones de víveres, como lo hizo Jesús con los panes y los peces. Los víveres en los refugios estarán destinados a durar tres años y medio, pero Dios se encargará de que no falte nada, tampoco la eucaristía y habrá numerosas curaciones.
Lo principal ahora es prepararse, porque no sabemos cómo escalará esta tribulación, no tener miedo, debemos aferrarnos a la fe y confiar en la misericordia de Dios.
Hay que estar en estado de gracia siempre, confesados, vivir santamente orar permanentemente, sobre todo el rosario. Tomar la comunión frecuentemente, mejor si es diaria, y al mismo tiempo dar gracias por ello. Debemos de bendecir nuestro hogar y consagrarlo a los corazones de Jesús y María, tener siempre agua bendita, mejor si es exorcizada, velas bendecidas, imágenes y estampas de Jesús, María y José.
Además, debemos aprovisionarnos de ropa caliente y colchas para el frío, alimentos no perecederos y agua, y en concreto deberíamos tener en casa un crucifijo bendecido, la medalla de San Benito y la Medalla Milagrosa. También, tener una representación de la Sagrada Familia en un lugar de honor y colocar un escapulario de la Virgen del Carmen sobre los hombros de la estatua de la Virgen María y San José.
La Virgen María ha prometido que todos los hogares que tengan este escapulario en un lugar de honor, estarán protegidos durante los días de oscuridad, y las personas dentro del hogar verán con claridad, como si fuera de día, durante ese período.
Todos los sacramentales deben ser bendecidos por un sacerdote, se deben consagrar los hogares a Jesús y María aspergiendo con agua bendita, o mejor exorcizada, en los cuatro rincones, y hacerlo con fe.
Si tienen un jardín, deben bendecir también los cuatro rincones del jardín con sal bendita, mejor exorcizada, esto convertirá su hogar en un refugio espiritual temporario.
La oración que recomendó Xavier Reyes Ayral es: “Oh Padre Eterno, te consagro esta casa a tu Sagrado Corazón, al Sagrado Corazón de Jesús y al Corazón Inmaculado de María.
Te entrego solemnemente la propiedad de esta casa como tuya y, si es tu voluntad, acepto recibir a cualquier hijo tuyo que busque santuario”, especialmente deberíamos hacer planes para asistir a nuestros seres queridos y a otra gente, porque muchas personas estarán en “conmoción espiritual”, tratando de dar sentido a esa experiencia desconcertante que vivieron.