Por Daniel Caran
No es una novedad. Es una realidad que día a día golpea más fuerte, la inflación carcome el poder adquisitivo de quienes tienen trabajo y de quienes sobreviven por fuera de las márgenes de la economía nacional y provincial.
Justamente, en Corrientes se toman medidas para intentar proteger a uno de los sectores económicos y laborales que movilizan la plaza económica local, los empleados públicos, jubilados y pensionados de la provincia. Son los que inyectan dinero a la otra pata de nuestra economía, el comercio. Sabemos que lamentablemente el aparato productivo correntino sigue siendo primario: ganadería, forestación y algo de turismo en los últimos años. No hay industrialización en nuestra tierra, otro tema recurrente a ser abordado.
Pero en este caso abordaremos las últimas medidas tomadas por la administración provincial para resguardar el poder adquisitivo de la clase trabajadora correntina.
El Poder Ejecutivo echó mano a una serie de anuncios de mejoras salariales que regirán a partir de fines de este mes. Claro que cualquier tipo de mejora siempre corre con desventaja ante una espiral inflacionaria que pareciera no tener techo hasta ahora, sin embargo, lo interesante es el esquema de mejoras que da el Gobierno correntino.
Según las evaluaciones hechas por sindicatos estatales, incluso por los propios agentes públicos, esas mejoras son una sábana demasiado corta que contrasta con una realidad. Los ingresos nacionales a nuestra provincia, se mantienen en porcentajes récords desde iniciado este año.
Pero sobre sale una modalidad en Corrientes. desde hace más de diez años el Poder Ejecutivo mantiene un pago por fuera de las escalas salariales del empleado estatal, lo llaman plus y en algún momento fue bono. Son pagos extraordinarios que en la provincia se transformaron en ordinarios. Se “normalizaron” ante su mantenimiento en el tiempo.
Las provincias vecinas y gran parte de los distritos provinciales no poseen este mecanismo de plus. Por lo general, las mejoras se aplican en el salario básico del trabajador. Mucho más cuando se habla de que, en este caso, el empleador es el Estado.
Es decir, el mismo Estado no se puede evadir así mismo. Se supone ese principio lógico además de legal. Sin embargo, en Corrientes algunas lógicas no ocurren.
Según trascendidos se espera que en las próximas semanas la administración provincial vuelva hacer anuncios de “mejoras” salariales, pero siempre sobre el mismo mecanismo de plus. Claro que es importante mejorar el poder adquisitivo de los y las trabajadores, pero se reitera una línea que no aborda la cuestión de fondo. La de que las mejoras disparen los ítems salariales de agentes estatales y la clase pasiva en la provincia.
De lo contrario pareciera ser que se está gobernando sobre la improvisación y en el cortoplacismo.