Por Daniel Caran
Asistimos al inicio de campaña electoral de la administración provincial. Por ahora, un poco solapada con actos oficiales que en algunos casos pareciera ser que dejaron de lado los protocolos sanitarios. Justamente esa cuestión es la medular, clave y a la vez, preocupante.
El Coronavirus sigue allí afuera y hay un desafío inmediato en la provincia. dentro de tres semanas comenzarán las clases y de manera presencial, al menos ése es el objetivo de la gestión correntina.
Pero hay varios escollos a superar en pocos días. Poner en condiciones las estructuras edilicias escolares históricamente con serios problemas: falta de agua potable, deficiencias en el sistema eléctrico y pastizales alrededor de los patios.
También la puesta en marcha y coordinación de protocolos educativos sanitarios, se habla de 15 alumnos por aulas: ¿cuántas aulas por escuelas deben estar en condiciones? ¿cuántos sanitarios deben estar óptimos para que chicos y chicas puedan tener seguridad sanitaria?
Y por sobre todo. Los maestros no serán vacunados antes del inicio clases. También se habla de un sistema mixto: ¿deberán atender lo presencial y virtual los mismos docentes?
Muchas preguntas que no tienen respuestas sólidas a tres semanas de iniciarse el ciclo lectivo.
Toda esa incertidumbre tras un año pandémico sin clases presenciales y ahora que se buscar revertir, pero con la pandemia aún activa. Se añade a esta cuestión del regreso a las aulas con la situación de nuestros médicos en toda la geografía correntina. ¿Por qué no se puedo terminar de vacunar al personal médico ni siquiera con la primera dosis?
Hace unos días hubo un atisbo de querer responsabilizar al Gobierno del Presidente Alberto Fernández en esa cuestión, otra vez, autoridades provinciales sacándose las responsabilidades que le son propias. De igual forma después, ese intento fue desactivado debido a que las dosis llegan de manera correcta a la provincia como a otros distritos del país y vecinos a Corrientes.
Recordaba que fue el pasado 9 de diciembre en una conferencia de prensa que el Gobierno Provincial anunció la adquisición de 100 mil dosis de la vacuna rusa Sputnik V.
Sin muchos detalles el anunció gravitó ocupando muchos espacios en los medios de comunicación locales, no fue para menos, se trató de una buena y alentadora noticia.
Sin embargo, a dos meses de ese anuncio del Ejecutivo correntino no solamente no se supo más nada de las vacunas que se comprarían, si no que se conocieron quejas del personal sanitario correntino que no accedió a las dosis enviadas por el Gobierno Nacional.
Tanto en Capital como en el interior de la provincia los trabajadores de la salud hicieron escuchar sus quejas. Además, también esperan por la vacuna los agentes sanitarios del ámbito privado, para recordarlo, el virus no hace diferencia entre médicos, enfermeros y resto de personal de sanidad sea público o privado.
Muchos frentes abiertos para cortes de cintas con tono electoral.
Los dirigentes deben ser responsables. El doble de la ciudadanía, la crisis por el Coronavirus aún no pasó y ni siquiera cedió. Lo vemos a diario y nos acercamos a cumplirse un año de pandemia en el país.
Las señales de cuidado sanitario a la población deben ser claras. No una imagen excedida en optimismo que nos lleve a un relajamiento social.
Nuestros médicos, enfermeros y resto del personal de salud, siguen trabajando sin vacaciones ni días libres.
El mejor tributo que podemos hacerles es cuidarnos y quienes tienen responsabilidades colectivas que den el ejemplo de cuidar al otro.
