Por Daniel Caran
En el periodismo de opinión cuesta repetir el tema puntual, más que nada porque –más allá de los argumentos- el propio periodista es quien no quiere ‘cansar’ a la gente con hechos o situaciones repetidas.
Pero no se puede obviar el verdadero drama que se origina y se repite con la problemática de la energía en Corrientes, y los insoportables cortes diarios.
Es que más allá de la problemática en general, de las argumentaciones que esgrime la DPEC, de lo heredado por malas administraciones y otras miles de yerbas esgrimidas por quienes desde hace décadas manejan pésimamente la empresa energética.
Todo bien, se podrá entender cada uno de esos justificativos, y se atenderán las obvias falencias que aún hay.
Pero la gente está cansada. Y lo expresa.
Además, en ese contexto de un problema casi generalizado sin inmediata solución, las facturas de luz aparecen infladas en sus costos como si se tratara de una burla. ¿Y entonces?... ¿Vale repetir el tema?.
No se puede obviar o esconder que en éstas últimas noches se quedaron sin energía hasta instituciones de salud de reconocida trayectoria internacional, poniendo en riesgo la vida de cientos de pacientes que en ese momento estaban internados.
Hospitales, centros de salud… todos sin luz “por problemas ajenos a la empresa energética”, tal como reiteradamente aducen en sus boletines de prensa.
Es imposible parar el enojo de los pequeños y medianos comerciantes, de los ciudadanos comunes, que esperan ansiosos los momentos de descanso pero después viven el infierno no deseado de noches a oscuras.
Podrán mandar cientos de explicaciones. Podrán dar otras tantas argumentaciones. El tema es que la luz se sigue cortando todos los días… y la gente está recontra cansada. ¿Lo sabrán?.