El pasado martes una vivienda del barrio San Antonio sufrió un gran incendio que la destruyó en su totalidad. La familia que la habitaba, integrada por seis personas, se encuentra durmiendo en la calle y necesita la solidaridad de los correntinos.
Una de las habitantes de la vivienda, Mercedes Vargas, comentó los problemas que se generaron a raíz del episodio. “Se prendió fuego mi casa por un cortocircuito. Tengo un hijo discapacitado y tengo inconvenientes para movilizarme”, contó en Radio Dos.
La familia no posee recursos económicos para poder reponer lo perdido en el incendio. Por eso pidieron colaboración con chapas y tirantes. “Lo único que pido al intendente y al gobernador es que me ayuden con chapas y tirantes. El único que trabaja es mi marido, que es remisero”, expresó en el medio radial.