La medida fue tomada por el ministro de Inmigración, Alex Hawke, que tiene el poder personal de revocar la visa de un ingresante al país; los abogados del tenista apelaron.
El ministro de Inmigración de Australia, Alex Hawke, finalmente tomó la decisión de cancelar la visa de Novak Djokovic, el mejor tenista del mundo, que puede estar impedido de acceder a ese país por los próximos tres años. Los abogados del deportista apelaron la medida, que encontraría una resolución muy pronta de la justicia: ya empezó una audiencia que definirá la suerte del serbio, que pretende participar en el Abierto de Australia. El torneo comenzará este lunes y el número 1 del ranking quiere defender la corona lograda en las últimas tres temporadas.
La determinación de Hawke, que como ministro de Inmigración tiene la potestad personal de revocar la permanencia de un visitante, tuvo lugar casi a las 18, hora local, de un viernes, por lo que casi no queda tiempo para que haya una resolución definitiva del conflicto antes del torneo. En última instancia, la organización del certamen puede ubicar el debut de Djokovic (frente a su compatriota Miomir Kecmanovic) el martes, última jornada de la primera rueda. La audiencia de esta noche australiana es conducida por el juez Anthony Kelly, el mismo que ordenó el último lunes liberar al tenista por defectos en el proceso de rechazo de Migraciones a su ingreso al país.
Hubo mucha presión a Hawke, tanto por parte de la prensa para que tomara la determinación pronto y avanzara en la situación que ya desgastaba la imagen internacional de Australia, como por parte de la oposición política para que expulsara al tenista, que había ingresado al país esgrimiendo una excepción médica dada su falta de vacunación contra el coronavirus. El funcionario, abiertamente liberal, tiene publicado en su portal de internet un discurso en el que afirma: “Soy un gran creyente en las ideas que emanan de la gracia de Dios, el perdón, la redención y las segundas oportunidades”. Sin embargo, la conferencia de prensa del jueves ofrecida por el primer ministro Scott Morrison, líder político del país y amigo de Hawke, había dado a entender claramente que el gobierno pensaba expulsar al deportista.
En un primer reclamo a la justicia, Djokovic había tenido cuatro días atrás un fallo favorable por parte del juez Kelly, que había ordenado al gobierno australiano liberarlo del hotel de Melbourne para inmigrantes detenidos donde había sido ubicado. Pero el abogado que representó al Ministerio de Interior, Christopher Tran, advirtió al finalizar la audiencia que el gobierno se reservaba el derecho a expulsar al deportista mediante la potestad de Hawke. Eso terminó ocurriendo.
Pero no fue el final del entredicho judicial entre Djokovic y las autoridades australianas, porque los letrados del número 1 del ranking mundial siguieron la batalla de inmediato. Es el mismo magistrado, Anthony Kelly, titular de la Corta Federal y de Familia de Australia, quien tomó el caso. En su primera decisión, al final de una audiencia que, con interrupciones, duró unas 7 horas, fundó la orden de liberación al jugador en cuestiones de forma en el proceso de ingreso del serbio al país. Ahora conoce el tema de primera mano.
En las jornadas posteriores a aquella decisión de Kelly se supo que Djokovic había esgrimido haber tenido un resultado positivo de coronavirus el 16 de diciembre, pero de inmediato trascendió que interactuó con personas en los dos días posteriores a ello. El tenista admitió eso en un comunicado reciente y perdió respaldo hasta del gobierno de su propia nación.
Y al parecer, también apoyo público en Australia. Una encuesta citada por el diario Herald Sun, de Melbourne, afirma que antes de la noticia de la cancelación de la visa 84% del total de los consultados quería que Djokovic fuera deportado.
El comunicado del ministro Hawke
“Hoy ejecuté mi potestad bajo la sección 133C(3) del Acta de Migración para cancelar la visa presentada por el señor Novak Djokovic fundamentado en la salud y el buen orden, basado en que hacerlo era de interés público.
Esta decisión sucede a órdenes de la Corte Federal y de Familia del 10 de enero de 2022 que eliminaron una cancelación previa, en razón de la corrección procesal.
Al tomar esta determinación, cuidadosamente consideré información suministrada a mí por el Departamento de Asuntos Internos, la Fuerza de Fronteras Australianas y el señor Djokovic.
El gobierno de Morrison está firmemente comprometido con proteger las fronteras de Australia, particularmente en relación con la pandemia de Covid-19.
Agradezco a los funcionarios del Departamento de Asuntos Internos y de la Fuerza de Fronteras Australianas, que trabajan cada día para servir a los intereses de Australia en ambientes operativos cada vez más desafiantes”.