Encabezada por su delegado normalizador Hugo Rivas, la FAREM mostró su disconformidad por un posible incremento del primer kilómetro, a menos que la suba "se refleje en el bolsillo del conductor", remarcó y no en gastos de base o alquiler.
Ante una próxima suba de la tarifa de remis en los próximos días, la Federación Argentina de Remises (FAREM) que nuclea a los trabajadores del volante, se opone a una posible suba, la cual sería de un 15%.
Rivas aseveró que "la nueva suba del remis la está manejando esta persona que sale a hablar siempre en la radio, la tele y los diarios, Juan Castillo, que para nosotros representa a los empresarios y no a los trabajadores", dijo el delegado, quien resaltó que "es dueño de una agencia y no representa a los trabajadores, esa es la realidad".
El delegado remarcó que "ellos no pueden subir la tarifa así porque sí, porque de esa manera le están tocando el bolsillo a los usuarios". También dejó en claro que "si los empresarios que piden y dicen que van a aumentar la tarifa absorben ese costo, ahí sí estaríamos evidenciando que piensan en los trabajadores y en el titular del vehículo".
Rivas dijo que la medida sería justa si el chofer no tiene que pagar también ese aumento y vea retribuido el incremento en su bolsillo, "pero si suben la tarifa y sobre eso le aumentan al trabajador el precio de la base y los alquileres, ¿en qué quedamos? Ahora, si aumentan la tarifa y no le tocan al titular el aumento de base, ni al chofer los alquileres, ahí sí. Porque le das un margen para recuperarse de lo que son los gastos para el titular, por los repuestos del auto y al chofer para que le quede algo de la recaudación".
La federación, encabezada por su delegado en Corrientes, mostró su disconformidad, si la suba se da de esa manera para los choferes: "Esperaremos a ver si sube la tarifa y, si no le tocan el bolsillo al titular o al chofer, no tomaremos medidas. Pero si automáticamente sube la tarifa, les suben el alquiler y el costo de las bases a los choferes, entonces estaremos tomando otras medidas".
Recordemos que el anterior aumento de la tarifa del remis se registró el 1 de julio, cuando llegó a los $200 -porque anteriormente era de $170-, que es la cifra con la que el usuario inicia su viaje. "El remis actualmente cuesta la mínima $200 y la quieren llevar a $230. Ahora, yo pregunto: ¿dónde hay una bandera, la más cara de Corrientes, que venda nafta Premium que cueste $230 el litro?", detalló Rivas, quien aseguró que "si nos basamos en la Ordenanza Municipal, no hay un combustible a ese precio".
El delegado normalizador busca que los trabajadores del volante se queden con ese porcentaje pero esperarán a ver qué medidas se tomarán. "Ellos quieren aplicar el aumento a partir de los primeros días de septiembre, nosotros esperaremos y acorde a lo que pase, veremos qué medidas tomar".
Hugo Rivas es el delegado normalizador al frente de la FAREM en Corrientes (Federación Argentina de Remises) y se encuentran realizando inspecciones para conocer el estado de los trabajadores y empleadores. "Nuestro gremio hace poco inició inspecciones y notificaciones del Ministerio de Trabajo de la Nación, que nos da ámbito de aplicación", resaltó pero es algo que no pudieron hacer con todas las empresas, pues "la mayoría de las agencias aceptaron la notificación, menos tres. Las demás nos abrieron las puertas".
También remarcó que el titular de la Asociación de Remiseros de Corrientes, "Juan Castillo no representa ni al chofer ni al titular porque es dueño de agencia, por ende, representa únicamente los intereses de los agencieros".
Para finalizar, Rivas dejó en claro que sobre la posibilidad de un posible incremento de un 15% a la tarifa, "esperaremos a ver qué pasa con el tema de la tarifa, el usuario tiene que saber que eso se rige por el Municipio. Ya venimos hablando con los concejales y si vemos que realizan el aumento, tomaremos medidas".
