Realizaron un informe del suelo con las posibles razones pero aún no estaría en manos de la Secretaría de Infraestructura.
Pasaron dos meses del hundimiento de la calle General Paz entre Vélez Sarsfield y Perú, pero aún no tienen una solución. A principios de marzo se había producido un bache de gran tamaño que obstruía el paso y mantenía en vilo a los vecinos. A las dos semanas de haberlo reparado se volvió a hundir y desde entonces estarían realizando tareas de socavamiento del suelo.
En una primera instancia se desconocía la razón por la que se había provocado, pero se deducía que era por las intensas lluvias que sufría la comuna en las primeras semanas de abril.
Luego los ingenieros habían determinado que la causa del hundimiento se debía a la rotura de las cloacas, lo que había producido que el pluvial se descalce y genere el cráter en el suelo.
Sin embargo, al volverse a producir el desmoronamiento del suelo se descartaron estas ideas y tuvieron que volver a realizar los trabajos de socavamiento.
Este bache generado en la calle General Paz fue reparado en tres ocasiones. Pese a que la última vez restituyeron los caños pluviales y habían realizado el relleno del suelo, las consecuencias continuaron.
Las tareas de socavamiento tardaron más de un mes debido a que las cloacas están a 8 metros de profundidad y las lluvias de abril habían retrasado las tareas.
“La semana pasada terminaron el relevamiento constatando en un informe pero aún lo estamos esperando”', indicó a El Litoral Mathias Cabrera, secretario de Infraestructura.
Para terminar el estudio del suelo tardaron más de un mes debido a que las cloacas están a 8 metros de profundidad y se podría provocar cualquier fisura nuevamente. Esto hace que su solución sea más compleja porque complica el trabajo de los operarios.
Según había indicado a El Litoral el secretario de Infraestructura Mathias Cabrera: “El pluvial tiene aproximadamente 800 milímetros, por lo tanto es un gran caudal de agua. Esto pudo haber provocado la impulsión de la cañería que corresponde a los bombeos de líquidos cloacales”. El Litoral