Sesenta y nueve artesanos de la provincia recibirán la beca destinada al sostenimiento de la actividad. Una inversión de 5.550.000 pesos del sector volcados a la provincia, de manera directa. Con ella, podrá acceder a la compra de materia prima y equipamiento.
Sesenta y nueve correntinos recibirán la beca MANTA, destinada al sostenimiento de la actividad artesanal. Esta ayuda económica, generada para promover la producción artesanal y mejorar su sustentabilidad en el contexto de emergencia sanitaria, fue impulsada por el Ministerio de Cultura de la Nación, a través de la Secretaría de Desarrollo Cultural y el programa Mercado de Artesanías Tradicionales e Innovadoras Argentinas (MATRIA).
La inscripción estuvo abierta durante un mes, desde el 6 de octubre hasta el 4 de noviembre. Se postularon a MANTA -a través de formularios disponibles en la plataforma digital- 10.947 artesanos, manualistas y emprendedores. De estas, se ponderaron 2.423 presentaciones, a través de los datos ofrecidos en los formularios y su validación a partir de bases propias y el cruce de datos con las áreas de artesanías de las provincias, e incluso de municipios y referentes.
Los destinatarios fueron seleccionados en tres instancias diferentes: en la primera de ellas, un fondo de 10 millones se distribuyó entre 100 maestros artesanos, son 100.000 para cada uno, destinados a adquirir: materia prima, equipamiento, conectividad. Los beneficiarios fueron: Nicanora Niz, Gregorio Oviedo, Rosario Zalazar y Diego Casafús.
Ante la cantidad de inscriptos, cerca de 11.000, se decidió una ampliación presupuestaria y el beneficio se amplió en segunda instancia a 900 artesanos en todo el país (a los que se otorgaron también 100.000 pesos) y, luego, a una tercera instancia que alcanzó a 600 más, los que recibirán un estímulo de 50.000 pesos. En total, son 1.600 beneficiarios en todo el país.
En Corrientes, cuatro maestros fueron elegidos en la primera, 38 en la segunda y 27 en la tercera. La inversión es de 5.550.000 pesos para el sector artesanal de la provincia, de manera directa, sin ninguna mediación, informó a este medio Roxana Amarilla, Coordinadora de MATRIA.
El Mercado de Artesanías Tradicionales e Innovadoras Argentinas (MATRIA) es el programa mediante el cual se implementó MANTA en todo el país. El mismo es un “incentivo directo al corazón del mundo artesanal, por lo que fue imposible que personas que no hicieran artesanías lo recibieran”, destacó la coordinadora del programa nacional.
“Los artesanos debieron completar un formulario muy complejo al que se accedía desde una plataforma en línea, completando datos de contacto, localización, conectividad, bancarización, proceso productivo y sobre el patrimonio cultural inmaterial, entre ellos, transmisión de técnicas específicas de pueblos originarios, años de trayectoria desde su biografía, y un dato no excluyente: si la artesanía constituía su único ingreso”, detalló la referente acerca de los requisitos solicitados en la inscripción.
“El equipo separó entre esas casi 11.000 postulaciones los procesos artesanales de los manuales. Para ello, validamos la información que teníamos con las aéreas provinciales, municipales o bien referentes”, señalaron. Mientras que “el jurado ponderó casi 2.500 formularios en la provincia de Corrientes; todos los que fueron aceptados como artesanos lograron el financiamiento”, resaltó Amarilla.
Datos socio económicos que definen al sector artesanal
El sector artesanal fue uno de los más afectados en el mundo por la pandemia de coronavirus, y ante esta situación, el artesanado en países latinoamericanos fuertemente atados al turismo, se encuentra canjeando su producción por comida en las calles. En Argentina no se llegó a tal extremo gracias a la fuerte inversión en la economía informal, indicó la coordinadora de MATRIA.
En esta postulación, encontraron dos situaciones: por un lado, que muchos artesanos no estaban bancarizados, y por el otro, que parte del artesanado tradicional, en situación de vulnerabilidad cuenta con un beneficio social, por lo que podía usar la cuenta en la que se recibe el subsidio. A partir de ello, se hizo un convenio con el Banco Nación para que accedan a la Billetera Virtual, a la que después se sumarán otras acciones de orden comercial y económico, adelantó Amarilla.
Del mismo modo, le pareció oportuno aclarar que MANTA no tiene las mismas características que el IFE y Sostener Cultura porque el fondo fue creado “para que el artesano pueda invertir en su proceso, para volver al circuito económico y retomar el modo de economía estacional. Además de generar nuevos circuitos, frente a un mundo remoto al que todos tenemos que subirnos, por eso fue importante el rol de hijos y nietos, ayudando a completar las postulaciones o facilitando a los maestros a las sesiones virtuales”.
La importancia de las Artesanía en el mundo
Consultada sobre el valor de las artesanías, además de su participación en los circuitos turísticos, respondió: “un maestro mocoví, chaqueño y escultor me dijo “la artesanía es la madre de todas las artes”. Y aparte de ser la primera manifestación artística, no solamente nos brinda el acceso a objetos portadores de belleza y que tienen una función, sino que además siempre habló de su entorno y de su paisaje cultural”.
A esta definición sumó otras como que la artesanía no es algo que pasa de moda, es un objeto que queda a los hijos y nietos de legado, que habla claramente de la cultura y del entorno de un pueblo o comunidad. Por eso, “en este mundo en crisis, en el que se cuestiona el modo de producción y consumo industrial, se considera más sustentable el modo artesanal”, finalizó.
