El presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, ha aceptado este lunes la propuesta del primer ministro socialdemócrata Marcel Ciolacu de continuar en el cargo, en esta ocasión al frente de una «coalición proeuropea» formada por liberales y las minorías étnicas, con «todas las posibilidades de continuar el muy buen camino».Iohannis ha considerado que la nueva coalición sabrá abordar «muy bien» los problemas más inmediatos, como son la elaboración de los próximos presupuestos y establecer un calendario para las elecciones presidenciales , cuya primera ronda tuvo que ser suspendida por irregularidades y ante la sombra de injerencia rusa.«Se avecinan tiempos complicados, pero creo que todos hemos aprendido de los errores del pasado», ha dicho Ciolacu junto a Iohannis en el Palacio Cotroceni. «Los rumanos necesitan estabilidad, reformas y seguridad», ha dicho. «Junto con mis colegas de la coalición, encontremos las mejores soluciones para superar los desafíos. No será un mandato fácil», ha reconocido.Los socialdemócratas (PSD) se reservan el control de ocho carteras del gabinete, entre ellas algunas de las principales como Defensa, Justicia, Trabajo y Economía, mientras que los liberales (PNL) ocuparán otra seis, entre estas Exteriores, Fondos Europeos e Interior, y la Unión Democrática de Húngaros en Rumanía (UDMR), dos.Asimismo, se ha conocido también este lunes que la coalición presentará también un candidato único para las presidenciales. Se trata de Crin Antonescu, antiguo dirigente del PNL y exministro a finales de la década de 1990, así como expresidente interino durante un mes a mediados de 2012.La nueva formación de gobierno no contará finalmente con los conservadores de Unión Salvar Rumanía (USR), tal y como su ausencia en la mesa de negociación durante las últimas semanas dejó entrever.Desde el partido han adelantado que no votaran a favor del nuevo gabinete, ni respaldarán tampoco la candidatura de Antonescu. «Nada cambia. Tenemos el mismo primer ministro, la misma forma de gobernar, sin un recorte serio del gasto estatal para reducir el déficit y el endeudamiento», han protestado, recoge Digi24.Aún sin los votos de los conservadores, la coalición liderada por Ciolacu tiene los apoyos necesarios en el Parlamento, después de unas elecciones legislativas en las que la ultraderecha experimentó un fuerte crecimiento , de la mano de Alianza para la Unión de los Rumanos (AUR), que quedó como segunda fuerza. A la AUR se sumó la irrupción por primera vez en el Parlamento de otras fuerzas ultranacionalistas como son S.O.S. Rumanía y Partido de los Jóvenes, aliados del candidato considerado prorruso de las presidenciales, Calin Georgesc