De ellos 71 han sido identificados y 31 personas que podrían haber estado en el edificio cuando se derrumbó siguen desaparecidas, según informaron las autoridades.
El número de muertos por el derrumbe de un edifico ocurrido el 24 de junio en Surfside, en el estadounidense estado de Florida, subió este domingo a 90, según informaron las autoridades locales, tras encontrar cuatro cuerpos más.
De los cadáveres encontrados, 71 han sido identificados y 31 personas que podrían haber estado en el edificio cuando se derrumbó siguen desaparecidas, anunció la alcaldesa del condado de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, en una conferencia de prensa en el 18º día de búsqueda, consignó AFP.
Se retiraron del lugar más de 6.000 toneladas de hormigón y otros escombros, agregó.
Las operaciones de búsqueda continúan las 24 horas del día y "estamos a punto de acceder a los coches del garaje" subterráneo, dijo Alan Cominsky, jefe de los bomberos de Miami-Dade.
Cominsky evitó dar un plazo para la finalización de la operación.
"Es difícil dar una fecha, pero creemos que podremos retirar todos los escombros", dijo y subrayó que "es un trabajo metódico para las cuadrillas que están haciendo la búsqueda a mano. Es un proceso lento".
El equipo de rescate del ejército israelí, que participó en la búsqueda a petición de la numerosa comunidad judía de Surfside, tenía previsto abandonar el lugar este domingo, dijo Levine Cava.
La tragedia
Las Champlain Towers South, un edificio de 12 plantas construido en el paseo marítimo en 1981, se derrumbó parcialmente durante la madrugada del 24 de junio.
Las autoridades hicieron una demolición controlada el domingo pasado del resto del edificio, lo que permitió a los equipos avanzar en zonas de excavación antes inaccesibles.
La preocupación se focalizaba en el edificio Champlain Towers North, construido cerca por el mismo promotor, en la misma época y con los mismos materiales.
El alcalde de Surfside, Charles Burkett, dijo el domingo que las primeras comprobaciones sobre la fiabilidad de este inmueble fueron positivas.
"Los resultados iniciales muestran que la resistencia del hormigón es muy buena, al mismo nivel o superior al que debería ser", explicó y añadió que todavía hay que realizar más comprobaciones.