Luego de haber renunciado al triunvirato de la CGT por sus diferencias con el resto de la conducción de la central obrera, el secretario adjunto de Camioneros, Pablo Moyano, buscará afianzar el armado de un frente de sindicatos opositores a la gestión de Javier Milei, con el fin de priorizar las medidas de fuerza y movilizaciones en las calles.
«Ahora va a ir por el lado de un armado de gremios que quieren luchar», aseguró este sábado una fuente sindical cercana al moyanismo.
Pablo Moyano, uno de los siete hijos del ex titular de la CGT, Hugo Moyano, formalizó el viernes su salida de la principal central sindical del país, al justificar en una carta que envió a su Consejo Directivo que no coincide con las decisiones adoptadas por «la mesa chica» de la organización obrera.
La semana pasada, Hugo Moyano habló por teléfono con los referentes del ala moderada de la central, Héctor Daer, Andrés Rodríguez y Gerardo Martínez, y todos coincidieron en no apoyar el paro que el líder camionero pretendía convocar para el próximo 5 de diciembre junto a los estatales de ATE y otras agrupaciones sindicales y sociales.
Esa fue la gota que rebalsó el vaso para Pablo Moyano, quien ya había amagado un par de veces con marcharse de la CGT al considerar que en su conducción se impone una mayoría «dialoguista» con el Gobierno.
Su lugar podría ser ocupado por otro dirigente de Camioneros que designe Hugo. También influyó que rápidamente se deshilachó la Mesa Nacional del Transporte, con la cual deseaba meter presión a la Casa Rosada.
En ese marco, Pablo seguirá adelante con su idea de una medida de fuerza para principios de diciembre, junto a la conformación de un polo de sindicatos que buscan confrontar con la gestión libertaria.
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«Es momento de avanzar en la organización del movimiento obrero junto a quienes, como Pablo Moyano y Paco Manrique, ya no se aguantan ver pasivamente el ataque del Gobierno. Es imprescindible un Frente Sindical de Resistencia», sostuvo este sábado en su cuenta de X el titular del sindicato de Aceiteros, Jorge Yofra.
Manrique, titular de los mecánicos de SMATA, ya había renunciado a su cargo en el Consejo Directivo de la CGT un mes antes que Pablo Moyano, también por su rechazo a la postura del resto de la central de no ir al choque con el Ejecutivo.
