Por Daniel Caran
Desmantelamiento de la salud pública al extremo, mientras el gobernador Colombi veranea cómodamente en Punta del Este.
Puede que, convencidos de su partida, todos se echen al descanso pleno. Se entiende.
Lo que es un verdadero despropósito es jugar con la salud ajena, con el bienestar de la gente.
Por ahí deambula la salud pública mental en la Provincia, con profesionales mal pagos, y otros convencidos en la crisis de seguir trabajando solo ‘por el salario’, cuando se sabe que la prevención, la formación permanente, y la integración profesional son de vital importancia en la formación médica en general.
La renuncia de la Dra. Paula León al cargo que ocupaba en el Hospital "Samuel W. Robinson" de Monte Caseros se enmarca en éste proceso “de locos”, para utilizar un juego de palabras en esta impresentable política destinada a desmantelar a salud.
La dimisión de la doctora León se debió a la negativa del titular del Ministerio de Salud, de aceptar abonarle a los psiquiatras del interior provincial el adicional denominado “Recurso Humano Crítico”, según lo establece la normativa legal vigente.
Lo que es más grave aún es conocer el negociado: el Ministro ofreció “regalarles” diez guardias activas por mes.
Pagar el adicional de Recurso Humano Crítico, lo que corresponde a cada profesional médico especializado en psiquiatría o psicología, no alcanza los $5.000 mensuales.
Diez guardias activas a cada médico implica un total de $20.000 aproximadamente por profesional.
¿No se quiere transparentar de donde viene la plata?.
¿De dónde salen los fondos para pagar (regalar) las guardias? ¿Cómo se rinde cuentas de esos fondos?
Así, el año calendario de Colombi y compañía empieza a transitar por recodos incomprensibles de dejadez e irresponsabilidad. Muy turbio.
Cosa de locos.