Por Daniel Caran
Caída en las ventas, productores decepcionados, comercios que cierran, maniobras extremas para evitar despidos.
La situación económico-financiera en Corrientes no es muy distinta a la de otros puntos del país, pero por estos lares puede que la problemática se agrave cuando no se avizoran decisiones concretas o políticas claras para salir del pozo.
Y no pasa por ser más o menos pesimista.
Solo basta con citar testimonios de distintos referentes de diversos sectores económicos que admiten la realidad tal cuál es, y sin poner en el medio las pasiones partidarias.
En el rubro comercial hay que hacer una sencilla recorrida por las calles céntricas de Corrientes para chocar con lo que pasa: negocios cerrados o vacios.
“Corrientes es una de las pocas provincias que tuvo pocos despidos en el país. Hacemos malabares para mantener los puestos laborales”, reconoció Enrique Collantes, de APICC.
“El comercio correntino no es diferente de las demás provincias, estamos con ventas en descenso, peleando”, dijo.
Trasladado al interior indistintamente los sectores productivos sufren la consecuencia de una inflación innegable.
"La caída en las ventas ha sido de entre un 40 y un 50%. En Virasoro no cerraron empresas. Pero se trabaja menos horas pero están manteniendo la fuente de trabajo", reconoció Mercedes Omeñuka, Asociación de Madereros y Afines de Corrientes (AMAC). En Virasoro, unas 1200 familias dependen del sector maderero.
Pablo Blanco, referente de la Asociación Hortícola Río Santa Lucía alertó: “el panorama es complejo. A la falta absoluta de políticas por la producción se suma el problema climático. No sabemos cómo vamos a salir del pozo”
Y mientras algunos referentes del gobierno provincial lo niegan, en Massalin Particulares de Goya ya empezaron con el infierno tan temido de los despidos: "La situación no es clara. Lo único que sabemos es que la empresa va tomando decisiones mes a mes con el personal", dijo Javier Medina, referente del Sindicato de Trabajadores Tabacaleros.
Gustavo Fernández, uno de los obreros despedidos, expresó: "la tecnología está dejando sin trabajo a la gente. En el pasado éramos 3000 personas, después quedamos mil y ahora son 300. Los despidos son sin causa"
Está claro que no todo pasa por una cuestión de pesimismo extremo. Será importante saber que si estamos en la lona, deberemos levantarnos rápido… no queda otra.