Por Daniel Caran
Los esfuerzos de Ricardo Colombi por mantener la calma en tiempos de zozobra parecen no ser suficientes, y ya empiezan a observarse bajas en la hasta hace poco férrea estructura política.
Muchos, convencidos de su liderazgo, aún siguen a rajatablas sus órdenes tal vez convencidos de que sacarán provecho de lo que se viene, cuando el propio Colombi ya no sea Gobernador.
Otros empiezan a dudar de un triunfo seguro en las urnas, y siguiendo ideales políticos, toman drásticas decisiones, como la que asumió la goyana Cecilia Gortari, una joven militante de la primera hora del radicalismo que por éstas horas renunció a su afiliación provincial y a su cargo que tenía en el Ministerio de Desarrollo Social.
Muchas elucubraciones se vienen haciendo en las últimas horas tras la dimisión de quien fuera funcionaria provincial en tiempos de Arturo Colombi y legisladora provincial con su sucesor Ricardo.
¿Todo pasa por una cuestión de coherencia en virtud de un radicalismo que empieza a mostrar fisuras hasta en cuestiones ideológicas?. Por supuesto que no.
Las traiciones políticas no son fáciles de perdonar, y por más que uno se llame Ricardo Colombi y esté sentado desde hace muchos años en el poder máximo de Corrientes, esas cosas no se pasan de largo. Lo de las traiciones.
Gortari fue, se recuerda, quien “puso la cara” en Goya cuando Osella no pudo ser candidato a Intendente, y se aguantó estoica la paliza de Gerardo Bassi en la urnas en 2013. Esperó su turno, trabajó en silencio. Y tenía la esperanza de al menos ser tenida en cuenta para esta nueva batalla que encara el radicalismo, y que tiene por principal objetivo mantener la Provincia y recuperar bastiones perdidos como la segunda ciudad provincial.
Pero Colombi impuso el dedo, aun faltando mucho tiempo, y ya decidió que Osella volverá a ser el candidato de Eco en Goya.
Esto molestó y mucho a la exlegisladora, que tiene espalda económica como para pegarle un chirlo a los desmanes caprichosos del mercedeño.
“Hoy decido empezar un camino diferente, el Comité de la UCR de Goya no me representa. Recientemente se “eligieron” autoridades partidarias y la conformación de muchos y en particular del Comité de Goya es una expresión de lo que digo, cada vez más cerrado y acotados los sectores representados”, escribió Gortari en un párrafo de su renuncia.
El encomillado de “eligieron” no es casual ni mucho menos. Muchos están hartos… y eligieron el desbande a tiempo.