Este viernes, en la sede de la Asociación de Trabajadoras/es del Estado de Corrientes (ATE), empezó el escrutinio definitivo para determinar quién ganó las elecciones de la conducción provincial del sindicato. Sin embargo, en urnas donde llamativamente asistió un 90% del padrón, porcentaje muy superior al 40% de promedio de todas las mesas escrutadas, Walter Zamudio sacó más del 90 por ciento de los votos, también “le hicieron votar hasta a los muertos”, indicaron trabajadoras/es afiliados que se oponen a la actual conducción de Chano Romero.
Por las irregularidades precedentes, certificadas por una escribana pública, fueron impugnadas dos mesas. Se trata de las urnas 29 de la ciudad de Esquina y 47 de Curuzú Cuatía, donde se demostró que hubo fraude. Concretamente, se confirmó que le falsificaron las firmas a varios votantes que no fueron a votar, o que murieron en 2020.
Al respecto, uno de los votantes que se acercó a votar en el hospital de Curuzú, vio “cómo la presidenta de mesa que responde a Zamudio falsificaba firmas de gente que no fue a votar, o de gente que ha fallecido. También, les ponía número a los sobres para saber si a quienes les prometió un ambo le votaron o no”.
Por otro lado, se informó que se ratificó que la conducción del centro de jubilados provincial lo ganó la lista verde, celeste y blanca, presidida por la jubilada Pocha Leonarda Correa, quien derrotó a Chano Romero por más del 70 por ciento de los votos. Asimismo, en la seccional Mercedes, también se ratificó el triunfo de la Verde, Celeste y Blanca, encabezada por la trabajadora de la salud Laura Moreyra.
Hasta el momento, faltan escrutar las urnas de Empedrado, Mburucuyá y Saladas, por lo que se pasó a un cuarto intermedio debido a las irregularidades presentadas en un acto que debió ser “transparente y democrático, sin burocracia ni corrupción sindical”, indicaron afiliadas/os a ATE Corrientes.
Es así que, contabilizadas las urnas hasta el momento, la Lista encabezada por Mauriño y Prieto tiene una leve ventaja sobre la oficialista, pero la anulación de las urnas fraudulentas dejaría sin definición aún la conducción provincial de ATE Corrientes.