Fue un año de muchos logros para el barrio Doctor Montaña. Uno de ellos fue la declaración como Monumento natural del Parque de Árboles creado por Pablo Vizlo, y ante la llegada de la Navidad, la docente Claudia Bizarro y la referente barrial Sonia Osorio junto con vecinos construyeron un arbolito navideño de tacuaras con un fin ecológico.
Por iniciativa de dos vecinas del barrio Doctor Montaña, Claudia Bizarro y Sonia Osorio, la novel reserva natural del Parque de Árboles hoy cuenta con un flamante arbolito navideño que fue bendecido este 24 de diciembre.
En diálogo con diarioepoca.com Claudia Bizarro contó “con la idea del cuidado del Medio Ambiente, pensamos en armar un arbolito ecológico. Al lado de la reserva hay un parquecito donde se junta mucha gente a la tarde, entonces armamos el arbolito dentro de la reserva pero cerca de allí para que la gente lo pueda ver. El árbol está adornado con carteles que tienen leyenda con valores y los nombres de los árboles autóctonos del lugar. También nos centramos en mensajes de salud por ser lo más importante en este año. Hicimos todo natural. Colocamos arreglos hecho con flores y semillas que se encuentran en la reserva”, detalló.
“También armamos un pesebre hecho de madera. La idea era mantener la línea de árboles y de la naturaleza”, sostuvo Claudia. “La gente se acerca, observa y pregunta. Varios vecinos nos reunimos para concretar esto. La idea que más predominó es la del cuidado del Medio Ambiente. Se pensó en tacuara porque al desarmar el árbol, servirán como tutores para futuras plantaciones. Es una pequeña muestra de los árboles autóctonos”.
En cuanto al tiempo que demandó el armado del árbol, Claudia contó que se comenzó a trabajar el sábado 19 de diciembre y concluyeron el 23. “El 24 vino el padre Carlos Fernández de la Iglesia Santa Catalina, y bendijo el árbol. Fue acompañado por los vecinos frentistas. La bendición fue muy linda y gratificante para todos los vecinos que hace años venimos pidiendo por la reserva, el parque y desmalezado. Vivíamos preocupados que no tomen los terrenos, hicimos un grupo de vecinos en alerta y entre todos fuimos logrando proteger esta reserva. Este árbol es la coronación de todo este esfuerzo de los vecinos en el año”, aseveró Claudia.
En tanto Sonia relató a época, “la idea de las tacuaras surgió del corazón de niña que tiene Claudia. Ella tiene tantas ideas y yo la acompaño porque son lindas y siempre buscan un fin para ser compartido. Creo que hay que demostrar que lo que uno se propone sí se puede concretar”.
“Se eligió las tacuaras por la fortaleza que tienen. Lo pudimos hacer gracias a la amabilidad del ingeniero Linder Bartra García, un señor de 81 años que tiene una quinta por Ruta 12 y nos donó las tacuaras. Las mismas tenían entre 13 y 15 metros”, describió sobre el proceso inicial del armado del arbolito. “La tacuara o el bambú es el material más renovable de la naturaleza y se caracteriza por sus cualidades de resistencia y durabilidad, pudiendo ser utilizado en las construcciones arquitectónicas, artesanía o agricultura, de formas variadas por eso elegimos las tacuaras”, relató sobre el por qué de la elección.
“Gracias a la disposición de Pablo Vizlo pudimos poner el árbol en el Parque natural. Nos abrió las puertas y nos dio toda la comodidad. Luego vino un vecino con su amoladora y cortamos las tacuaras en tamaño de 1, 25 metros. Se cortaron 42 tacuaras”, indicó Sonia.
Sin dudas que la inagotable creatividad de estos vecinos no quedó ahí. Comenzaron a ensamblar las tacuaras cortadas a modo de arbolito con cuatro faldones. “Otros vecinos aportaron para la pintura y en una tarde ya lo teníamos pintado de verde”, contó Sonia.
“La parte de decorado se armo con rodajas de madera. Otro vecino que colaboró con las imágenes hecha de madera. Se pusieron los nombres de los árboles del lugar, semillas y colores de las flores. Los chicos del merendero Manitas Multicolor fueron juntando semillas en el barrio: jacarandá, chivato, etc y así otra vecina fue armando los arreglos con piñas y moños. Las luces también se compraron con aportes de vecinos y conocidos”, dijo la referente barrial.
“Querer, proponer y concretar”
Con el sueño cumplido de crear un árbol ecológico que adorne el maravilloso Parque de Árboles, Sonia instó a querer soñar, proponerlo y concretarlo. “Cuando uno se propone un sueño hay que concretarlo. Va a costar, habrá miles de trabas, te querés caer, pero hay que tomar cómo se van dando las cosas e ir logrando los sueños. Estamos felices por lo logrado”, declaró emocionada.
“Nuestro sueño con Claudia es que estas acciones continúan en un futuro, que los chicos que hoy son pequeños el día de mañana, siendo adultos sigan construyendo este arbolito que está cargado de sueños del barrio. Me emociona y es lindo soñar. Nunca debemos perder eso y es algo que debemos transmitir a los niños, siempre soñar. Nosotros somos los que ponemos límites a las cosas, la mente y el corazón son tan grandes y con la ayuda de Dios sí se puede”.
Para finalizar Sonia destacó la iniciativa de Claudia, “admiro su corazón de niño. Hace 21 años la conozco y siempre me sorprenden sus ideas y nunca se las opaca, y si se las opaca estoy a su lado para que brillen de vuelta. Fue una experiencia espectacular”, resaltó.