El arroz es un alimento que se destaca por los múltiples beneficios que ofrece. Además de su sabor y de sus propiedades nutritivas, se caracteriza por ser versátil, es decir, por la variedad de platos que se pueden preparar con él. A continuación, 3 recetas sencillas y originales para disfrutar en cualquier momento.
1. Arroz con atún y arvejas
Puede que el arroz sea uno de los ingredientes más comunes en la cocina. Es económico, suele estar en todos los hogares y se presenta como una alternativa de comida ideal para aquellas personas que no se destacan por sus habilidades gastronómicas.
Como si fuese poco, basta con unos pocos ingredientes para convertir al arroz en un plato sumamente exquisito y nutritivo. Por ejemplo, se puede preparar una receta combinándolo con un poco de atún y de arvejas.
Es un plato ideal para el verano. Tras hervir el arroz, se deja enfriar y luego se mezcla con el atún y las arvejas, dejando las cantidades a gusto de cada persona. Basta con condimentar con un poco de sal y pimienta negra recién molida, sumar un hilo de aceite de oliva y listo.
2. Arroz con pollo y vegetales
Lo que muchas veces ocurre con el arroz es que se calculan mal las cantidades y se termina cocinando de más. Se guarda en la heladera y allí se encuentra con otros ingredientes que sobraron de comidas anteriores.
Cuando lo que sobra es un poco de pollo, una idea sencilla consiste en desmenuzarlo y mezclarlo con el arroz. Para darle más sabor y para que tenga más propiedades nutricionales, se puede agregar un poco de tomate, morrón, cebolla, ajo y otros vegetales, ya sean salteados o no.
3. Croquetas de arroz
Esta receta es un poco más compleja que las anteriores, solo porque exige de una mayor elaboración. Lo positivo es que se trata de un plato singular que se puede comer a modo de almuerzo o cena o bien como tentempié en cualquier momento del día.
Lo primero que hay que hacer es picar cebolla y ajo y sofreír con un poco de aceite de oliva. Luego, agregar una pizca de perejil y condimentar con sal y pimienta.
Una vez que el sofrito esté listo, mezclar con el arroz ya hervido y enfriado y formar pequeñas bolitas. Pasar cada una por un poco de huevo batido, luego por pan rallado y freír en abundante aceite caliente.