La maniobra de un vehículo en el que viajaban tres integrantes familiares que murieron generó un choque múltiple con un camión mosquito y una camioneta.
El fatal accidente generó conmoción en Corrientes porque falleció una familia conocida de una localidad.
Un trágico accidente en el que murieron tres personas tuvo lugar en la Ruta 12 el pasado viernes y los detalles lograron generar impacto por la gravedad de lo sucedido. Así es que se instaló un clima de luto en la provincia de Corrientes, luego que se registró el siniestro vial a la altura de la ciudad de Saladas.
En la escena del accidente vial se registró una colisión entre tres vehículos, confirmaron que murieron tres pasajeros y cuatro debieron ser internados por las graves heridas que sufrieron. Así lo informaron fuentes policiales, quienes trabajaron en la zona del accidente que habría sucedido en pleno temporal.
De esta manera, una reconstrucción de los hechos indicó que a la altura del kilómetro 972 de la Ruta 12, entre San Roque y Saladas, en un vehículo identificado como un Chevrolet viajaban tres integrantes de una misma familia, colisionó de frente con una camioneta Jeep.
La maniobra del conductor es que habría intentado sobrepasar a un camión mosquito que trasladaba una decena de automóviles en el acoplado. Sin embargo, en medio de la lluvia su accionar provocó una tragedia y murieron los tres individuos que iban en el primero de los autos: eran dos hombres y una mujer.
En cuanto a los demás pasajeros, iban tres en la camioneta y el conductor del acoplado, fueron internados en un centro de salud de Saladas, donde permanecen con observación médica, por las heridas que sufrieron en el choque múltiple.
Quiénes eran las víctimas del accidente en la Ruta 12
Tras el trabajo de los especialistas en la zona, se conoció la identidad de las víctimas fatales y de esta manera se confirmó que se trató de una familia. En el Chevrolet viajaban Luis, Adolfo y Luz Soler y eran oriundos de la ciudad correntina de San Roque.
Incluso, se confirmó que el primero era el padre de los otros dos mencionados, tenía 70 años y además trabajaba en una panadería. Quien manejaba el vehículo era su hijo, de 45 años, quien se destacaba como bombero voluntario y hasta llegó a estar a cargo de la comandancia de los socorristas de su jurisdicción.
Por último, la mujer era madre soltera y dejó a una hija huérfana, lo que también hizo entristecer a la gente del pueblo que conocía a la familia hace tiempo.