Continúa en toda la provincia la lucha contra el delito de abigeato. La Policía Rural y Ecológica despliega a menudo controles viales, en distintas rutas dentro del territorio correntino, con el objetivo de interceptar a aquellos conductores que trasladen ganado de forma ilegal.
El delito de abigeato y la faena clandestina representa un problema constante para cientos de productores que diario son víctimas de delincuentes que ingresan a los establecimientos ganaderos, se llevan los ejemplares, y en algunos casos hasta los carnean en el lugar.
Desde que comenzó el año, la fuerza provincial informó, a través de sus reportes oficiales, más de una decena de procedimientos que concluyeron con resultado satisfactorio: el decomiso de distintos cortes faenados de forma clandestina o sin las medidas sanitarias correspondientes.
MÚLTIPLES INSPECCIONES EN CARNICERÍAS
Y a esos datos se suman los controles en carnicerías, los cuales tienen como objetivo examinar los productos que se comercializan para constatar si cuentan con el aval legal para su venta y distribución.
En ese contexto, y pese a que no se tienen datos precisos acerca de la cantidad exacta, se estima que sólo en lo que va del año ya fueron secuestrados más de mil kilogramos de carne no apta para el consumo humano.
Así, el procedimiento que siguen los agentes, al notar irregularidades en la mercadería, es el secuestro, en primera instancia, y luego se continúa con el proceso de desnaturalización e incineración, a través del cual se retira del mercado los cortes que carezcan de las medidas de seguridad e higiene necesarias para la comercialización.
Flagelo que atenta contra productores
Afligidos, cientos de productores enfrentan el abigeato a lo largo y ancho del territorio provincial. Los damnificados luchan contra un delito que en el último tiempo presentó un importante aumento y que, pese al denodado esfuerzo que se realiza desde la fuerza provincial, son cada vez más los casos de robo de ganado. La sustracción de ejemplares y el tráfico de carnes, además de un daño moral, representa, también, un impacto económico negativo. Ante esa situación, es constante el reclamo por medidas de seguridad que pongan un freno al flagelo que tiene en vilo al sector ganadero.
Revisión de medidas sanitarias
Desde la Policía de Corrientes explicaron a EL LIBERTADOR que, si bien los operativos se realizan casi a diario, lo que se busca no sólo se centra en cortes, productos del abigeato, sino también aquellos que se hacen sin las medidas sanitarias correspondientes. En ese sentido, los controles también se dan en distintas carnicerías y abastecedoras de carne de toda la provincia, cuyo resultado permite a la fuerza provincial conocer si los productos fueron adquiridos bajo las formalidades higiénicas que se necesitan para estar aptos para su comercialización.