Con el último aumento del precio de los combustibles, en la Capital correntina llenar un tanque chico varía entre los 40.300 pesos y los 49.950, según un relevamiento realizado ayer por EL LIBERTADOR en distintas estaciones de servicio. La suba, que fue sorpresiva y está vigente desde ayer, tendrá un fuerte impacto en el transporte y, de todos los servicios que se verán afectados, el de taxis y remises es uno de los que está en la cuerda floja.
Según indicaron ayer referentes de ambos sectores locales, el nuevo valor de los combustibles los obliga a aumentar otra vez el precio de la bajada de bandera. Ya anticiparon, por ejemplo, que la mínima de los remises llegaría a los 1.000 pesos en estos días.
«La mínima tiene que ir a 1.000 pesos. Lamentablemente, es una ordenanza que nos obliga a subir el precio de la bajada de bandera», dijo a los colegas de Continental Corrientes el representante de la Federación Argentina de Remises (Farem), Hugo Rivas.
La normativa a la que hizo referencia, es la que establece que la tarifa mínima del servicio de remises se base en el litro más caro de nafta Premium. Es por ello que, a pesar de reconocer que esto sería un golpe duro para los usuarios, deberán respetar la ordenanza si quieren evitar posibles multas por parte de la Municipalidad.
Para el caso de los taxis, el vicepresidente de la Unión de Taxistas de Corrientes, Adrián Maidana habló con el mismo medio y expresó su profunda preocupación por la situación actual del servicio en la ciudad, especialmente en cuanto a aumentos en las estaciones de servicio del principal insumo que utilizan en los móviles.
Al igual que su par de Farem, Maidana anticipó que la situación los pone en lugar de tener que aplicar un ajuste en las tarifas. Aunque, por su lado, descartó la posibilidad de llegar a una mínima de 1.000 pesos como anticiparon en el sector de los remises.
ANGUSTIA
«Estamos preocupados porque es muy alarmante la situación. Después de las Fiestas la calle tiene muy poco movimiento, con poca demanda y estamos angustiados porque tenemos que volver a aumentar ya que estamos perdiendo plata», dijo.
Actualmente, la bajada de bandera en los taxis se sitúa en 750 pesos, y aunque el chofer reconoció la necesidad de ajustar la tarifa para no trabajar a pérdida, también dijo estar preocupado por el impacto del aumento en los clientes. «La gente no va a poder pagar 4.000 o 5.000 pesos en un viaje», anticipó.
Con la suba de estos servicios y el inminente aumento del pasaje de colectivos, la opción de las bicicletas, mencionada en la edición de ayer, es la más atractiva.