Por Daniel Caran
La calidad de vida de centenares de miles de correntinos y correntinas desde hace tiempo está marcada por la frustración, allí radica que si uno recorre el país y principalmente los centros urbanos más poblados de la Argentina siempre se cruza con algún comprovinciano.
Un reciente informe hecho público por delegados sindicales del Instituto de Vivienda de Corrientes (INVICO), organismo provincial encargado de construir viviendas familiares, consignó que hay un padrón de 72.000 inscriptos a la espera de una vivienda digna. Dicha lista lleva años de expectativa con cientos de familias que deben pagar alquiler, en el mejor de los casos o bien, vivir hacinadas junto a otras familias. Por ejemplo: las familias jóvenes que recién se inician. Además, el ente autárquico carece un programa habitacional para jóvenes que deseen independizarse de sus padres y vivir solos, con ingresos que puedan costear una cuota mensual. Estos programas existen en otras provincias vecinas como Chaco y Misiones. En Corrientes aún persiste una dinámica de la década del 80.
Pero regresemos al informe sindical del INVICO que posee datos reveladores. De las 72 mil personas en espera, 27 mil pertenecen a la ciudad de Corrientes y en la Capital provincial dicho informe revela la existencia de más de 60 asentamientos. Esto último una verdadera fotografía de la pobreza en la que está sumida la provincial.
La otra cuestión en todo esto es que el organismo provincial, que debería ser autárquico y lleva más de 20 años intervenido por el Poder Ejecutivo, al menos en la última década se dedicó hacer obras, pero no viviendas familiares. Desde polideportivos, arreglos de estructuras viales –la avenida Romero de la Capital Provincial que luego tuvo un hundimiento-; refacciones en comisarías y escuelas. Un verdadero desvío del espíritu para el cual fue creado el organismo provincial, su razón social de mejorar la calidad de vida a los correntinos. Para el resto están las demás áreas del Estado provincial: Ministerio de Obras y Servicios Públicos, áreas de infraestructura del Ministerio de Educación.
A estas situaciones hemos llegado en la provincia de Corrientes. La normalización en desvirtuar la esencia de un Estado que debe asegurar y proveer las herramientas necesarias para que cada correntino y correntina esté en igualdad de condiciones.
Y por sobre todo, para que sus sueños no parezcan inalcanzables o deban ser cumplidos en tierras foráneas. En esto debemos comprometernos a modificar y este año hay una oportunidad.
Buen domingo en familia para todos.